Elisa ansía dejar de viajar a través de los libros y hacer realidad el sueño de su vida: visitar Nueva Zelanda. Sin embargo, lo que prometían ser veinte días de ensueño se convertirán en toda una road movie cuando su madre le anule las tarjetas de crédito y su amiga sea repatriada a España. Sin dinero y con tan solo su anillo de pedida como medio de pago, recorrerá el país de la nube blanca a bordo de la caravana de Roberto, un ingeniero aeronáutico con espíritu trotamundos que le hará replantearse no solo su boda, sino toda su existencia.
En esta búsqueda por recuperar su verdadera esencia, deberá elegir entre vivir según las convenciones sociales o ser fiel a sí misma
¿Logrará Elisa destruir el anillo? ¿O la atraerá a las tinieblas?
Carla Crespo es una autora que leemos desde hace muchos años, y siempre nos ha enganchando con sus historias frescas y ligeras; más tras conoce su lado serio en "Amor en V.O", novela en la que se salió de su estilo, nos hizo extrañar esos toques de humor a los cuales nos "malacostumbró", y que recuperamos en este nuevo libro.
"Antes beso a un hobbit" narra la historia de Eli, una lectora empedernida (con la cual se sentirán MUY identificadas) que tiene una vida "fabricada", con una madre que no comparte sus momentos "frikis", y un prometido estirado con el cual ella tendrá que simular ser una persona que no es.
Nuestra protagonista solo puede ser realmente ella misma en compañía de su amiga Pilu, y de este joven extraño que acaba de conocer, Roberto, un aventurero que vive su vida al máximo, sin excesos pero disfrutando de cada momento; sin duda, un personaje de lo más "molesto" y coqueto.
El destino hará de las suyas y ambos protagonistas viajarán a Nueva Zelanda, donde todo comenzará a descontrolarse, y les garantizamos carcajadas de las buenas.
Además, en esta novela encontrarán muchos guiños interesantes, no solo a programas o libros que muchos amamos ("Harry Potter", "El señor de los anillos", "Los Simpsons"), sino que, incluso, leerán una referencia a la propia editorial, HQN.
Escenas bien descritas y narradas, que te transportarán en un abrir y cerrar de ojos a Nueva Zelanda y te harán sentir las mismas emociones que Eli al descubrir los hermosos paisajes y lugares en lo que se desarrollan gran parte de la trama, es uno de los atractivos que resaltamos de este libro,
En resumen, una novela fresca y corta, que disfrutarán página tras página. En momentos reirán, en otros se desesperarán, pero sobretodo, les dará gana de desconectarse del mundo y embarcarse a ese lugar al que siempre han querido ir.
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