Sofía y Ambrose estaban destinados a colisionar en Cudillero.
Ella iba todos los veranos.
Él vivía allí.
Dos desconocidos que cayeron abrazados a la piscina aquel mes de julio...
Cinco años después, Sofía vuelve dispuesta a cumplir una vieja promesa y romper cualquier vínculo que le ate a Ambrose.
Pero él está distinto.
En su intensa mirada azul hay una dureza desconocida. Y todo se complica. Da igual lo que intente apartarle de su mente, recuerda los atardeceres reflejados en las olas. Recuerda subir a Marte. Recuerda que le partió el corazón.
Esta es la historia de una chica. Un chico. Y un puñado de quizás.
Porque hay huellas en la arena que ni el viento es capaz de borrar. Porque hay amores de verano que sobreviven al paso del tiempo.
O no.
Una vez más Alexandra Roma nos conmueve con sus historias.
Por un lado tenemos a Ambrose, hijo de madre soltera quien junto a sus abuelos son un pilar fundamental en su vida, al igual que su disparejo pero muy pintoresco grupo de amigos: Roi, Candela, Theo y John. Juntos pasan los veranos en su natal Cudillero, los jóvenes trabajando en bares o negocios familiares además de divirtiéndose, pero Ambrose lo hace por ayudar a su familia y para poder cumplir su sueño de estudiar biología marina.
Por otro lado conocemos a Sofia, una madrileña que siempre pasa los veranos con sus padres y su mejor amiga Sabrina en la gran casa que tienen en Cudillero. Pero este año todo cambia, pues adelanta su visita y sin su querida amiga, hecho que da de qué hablar en el pueblo, y el motivo lo fuimos descubriendo a lo largo de la historia, ya que tiene relación con un pequeño secreto con el cual Sofia y su familia ha tenido que aprender a vivir.
Es en una calurosa noche cuando el camino de nuestros protagonistas se cruzan, conociéndose de la manera más extraña posible, lo que da paso a una relación que iniciará con retos que nos mantuvo de lo más entretenidas mientras los leíamos.
Poco a poco fuimos testigos de como Sofia pasa de ser "la niña rica" a formar parte del grupo de amigos de Ambrose, conociendo sus costumbre y llegando a sentirse una más de ellos, al mismo tiempo que ahondamos en la relación de ambos hasta la llegada de una fatídica noche donde todo cambia.
Cinco años después de este evento, Sofía volverá a Cudillero a cumplir una promesa y romper todo vínculo con Ambrose, pero para su sorpresa lo encontrará de los más cambiado al chico que recordaba de ese verano.
A lo largo de 352 páginas, Alexandra Roma nos transporta a dos tiempos: primero a "aquel verano", trasladándonos a los eventos que vivieron los protagonistas; y en segundo lugar a "este otoño" donde sabremos qué fue de ellos. Cabe mencionar que, el juego de tiempos está muy bien definido por lo que no tuvimos pérdida alguna, además de generar una gran intriga de lo que vendría después, todo esto acompañado de una narrativa emotiva y cálida que te hace empatizar con todos los personajes involucrados en la historia.
Sin duda Alexandra te enganchará con su pluma, presentándote un mensaje muy lindo dentro de esta historia y llevándote a un viaje que resultará en un montaña rusa de emociones, lo que hará que recuerdes a sus personajes por mucho tiempo.
¡Holaaaa!
ResponderEliminarQue preciosa la foto *_*
No se si es mucho lo que me apetece leer ahora mismo, pero es cierto que los romances sobre reencuentros y segundas oportunidades me gustan mucho.
¡besos!