Carla Suárez es una chica algo estrambótica a la que le gusta llevar el pelo de mil formas y tonos diferentes y vestirse con ropa de múltiples colores que a veces ni siquiera combinan entre sí; sin embargo, es un cerebrito: es ingeniero informático y habla nueve idiomas.
Nada más terminar la carrera recibe una oferta de trabajo, y cuando acude a la entrevista se encuentra con que Víctor Trueba, el hermano mayor de su mejor amiga, trabaja allí como psicólogo. Víctor es un hombre extremadamente serio y aburrido, que siempre lleva traje azul y corbata y de quien ella se burló mucho en su adolescencia.
Cuando empieza a trabajar se da cuenta de que ni él es lo que parece ni la empresa tampoco.
No sabemos qué tiene Ana que con cada libro que escribe nos sentimos identificadas. Muchas personas tienen inseguridades al puro estilo de Carla, y por eso algunas no lograron conectarse con ella, más en el caso de una de nosotras fue todo lo contrario.
Como cada novela de Ana, este libro cuenta con una trama que hace que no dejes de leerla, diálogos ligeros, frescos y sin tanto relleno.
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